martes, 6 de diciembre de 2011

LASI NSTITUCIONES SOCIALES

Teorías del origen de la “gens”.
1. Niebuhr y adeptos, sostenido por afirmaciones contenidas en la obra de Dionisio de Halicarnaso, consideran que la “gens” es un organismo artificial creado por Rómulo, quien crea la ciudad organizándola en tres tribus según las etnias fundadoras, los ramnes (latinos), los titienses (sabinos) y los luceres (etruscos). Cada tribu comprendía 30 curias, y cada curia 10 “gentes” (300 “gentes” en total). O sea, una simple distribución de carácter organizativo.
2. Ihering y Fustel, dos grandes historiadores, afirman que la “gens” es un organismo de carácter natural, resultado de la extensión de la familia, y formado por un grupo de estas con un antepasado en común, el “héroe epónimo”, del cual deriva el nombre de la “gens”. Algunos le dan un carácter “filologico” (el progenitor o la generación) y otros un carácter “religioso” (el culto propio, los dioses gentilicios). Esto último resulta interesante, puesto que un culto propio, importaría una verdadera “mitificación” sobre todo si alguno de los integrantes de la “gens” no descendiera del héroe epónimo.
3. Bonfante (basado en De Ruggiero) plantea un origen mixto, al mismo tiempo natural y artificial. De manera que sujetos pertenecientes a la “gens”, descendientes del héroe epónimo, o los ingresados por “coopatio”, definirían a la “gens” como un organismo de carácter político. La primera forma de Estado. Nadie podía pertenecer a dos “gens” como nadie puede pertenecer a dos Estados. El grupo humano primitivo, constituido para el mantenimiento del orden interno, y la defensa común.
Forman parte entonces de la “gens”, los nacidos en ella y los ingresados por “coopatio”. Pero además tiene una especie de adscriptos a ella, la “clientela”, que no gozan de los mismos derechos o prerrogativas, en virtud de un convenio voluntario (bilateral) celebrado con el jefe de la “gens” llamado “applicatio” por el cual gozan de la protección de la “gens” (jurídica y económica) a cambio de “prestaciones” (trabajo  en especies). Estas relaciones entre patrón-cliente, eran declaradas sagradas.
Sobre el origen de la clientela hay diversas hipótesis. Se ha dicho que los clientes serian los antiguos habitantes del lacio sometidos por los romanos, algunos dicen que solo en virtud de la “applicatio” ya mencionada, y otros por esclavos libertos. Esta última ha sido descartada, puesto que la clientela parece ser de carácter perpetuo, ligando a todas las generaciones, no así la de un esclavo liberto que si bien este podría mantener alguna relación con su antiguo amo, no su hijo por ejemplo, nacido libre o “ingenuos”. Además, la relación de clientela se establece con todos los miembros de la “gens”.
Un rasgo distintivo de la “gens”, es su nombre, el nombre común para todos los pertenecientes a la “gens”, el “nomen gentilitium”. Otro rasgo es el culto a los fundadores del grupo, la “sacra gentilia”. Existe también una sepultura común para los miembros de la “gens”. Y por ultimo observamos leyes y usos obligatorios para todos los miembros, ej: la gens Manlia prohibió el nombre Marcus, y la gens Fabia prohibió el celibato. Esto es el “ius decretorum”.

La Familia.
Aquí resulta más complejo. El significado de esta expresión en la Antigua Roma, no es el mismo que el que conocemos hoy día. Incluso en época post clásica es diferente. Conocemos todos los significados del termino en distintas épocas de la historia Romana, gracias a Ulpiano, un antiguo jurista.
Si la “gens” es la antigua manifestación del Estado, desaparecida esta (sus funciones absorbidas por el estado), aparece la familia con el verdadero sentido moderno. Ulpiano dice que primitivamente la familia esta formada por un conglomerado de personas sujetas a un jefe (con funciones de jefe político, juez y sacerdote). Estamos hablando entonces de la familia como una institución política. Aquí aparece la figura del “pater familias” jefe de una familia que surgiría de la división de la “gens” en varios grupos. Formaban parte de la familia los que estaban sujetos al “pater familias” con un sentido político, sus hijos varones y sus hijas solteras, los nietos de sus hijos varones, pero no los de sus hijas casadas, que formarían parte de otra familia.
Hoy día todos los integrantes del grupo domestico formarían parte de la familia, inclusive los nietos de las hijas casadas, lo que sugiere que uno puede ser miembro de varias familias, cosa inadmisible en la antigüedad. Hoy la familia ha perdido su carácter político.


Familia o gens.
Como decía al principio, existen diferentes opiniones con respecto a la importancia de la “gens” frente a la “familia” en cuanto a la formación de la Urbs, que si una es mas antigua que la otra, que si es mas importante, etc*. Como vimos, ambas instituciones son de carácter político, pero el papel de cada una en la constitución de la “civitas” parece de difícil resolución, aunque la “gens” se configure como intermedia entre esta y la familia. Al parecer en la organización romana pre-ciudad convivían las dos instituciones, y constituida la Urbs, la “gens” fue perdiendo terreno a favor de la “familia”.
En Roma la familia subsiste aun después de la constitución de la ciudad, lo cual no ocurre con la “gens”. A partir de la constitución de la “civitas” se advierte una sorda lucha entre el Estado (o civitas) y la “gens”. A medida que crecen los poderes del Estado decrecen los de la “gens”, y hacia el fin de la Republica, han desaparecido prácticamente todos los atributos políticos y sus instituciones relacionadas**.

FIN
* La familia, centrada en la autoridad absoluta del pater familias (ius vitae et necis) fue, según Peruzzi, la institución jurídica fundamental de la primitiva sociedad romana. La gens le parece una formación relativamente tardía, constituida por los vínculos consanguíneos de los descendientes de un antepasado común o de los que se habían asociado por intereses similares.
 **Incluso la clientela ha perdido el carácter originario para esta etapa, para ser de carácter personal no ligado al resto de la “gens”.

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